Las esposas de los diplomáticos participan en labores de beneficencia para apoyar a sectores vulnerables en los países donde se encuentran
Texto y fotos: Luis Felipe Hernández Beltrán
“Mujer, mujer divina,
tienes el veneno que fascina en tu mirar,
mujer, alabastrina
tú eres vibración de sonatina pasional,
tienes el perfume de un naranjo en flor,
el altivo porte de una majestad,
sabes de los filtros que hay en el amor,
tienes el hechizo de la liviandad…”
Agustín Lara
En 1975, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declara que a partir de ese año el 8 de marzo se conmemorará en todo el mundo el Día Internacional de la Mujer.
Antecedido por la lucha femenina en la Revolución francesa de 1789 y por el movimiento obrero a finales del siglo XIX, ambas luchas tenían entre sus demandas la igualdad de género en materia laboral, pues los varones ocupaban puestos de alta dirección en las principales empresas y, por ende, tenían mejores sueldos.
Seguía el espíritu machista, que predominó mundialmente hasta mediados del siglo XX, de que la mujer debía estar encerrada en casa, dedicada por completo a las labores hogareñas, como los quehaceres domésticos y el cuidado de los hijos; a pesar de no ser una lucha racial, las mujeres también fueron discriminadas, la mayoría de ellas, por sus propias familias, para inscribirse en la escuela o de ciertos privilegios que únicamente les “competían” a los hombres, como las herencias.
De ahí, vinieron muchos movimientos feministas en todo el mundo, todos liderados por mujeres, que, entre otros detalles, solicitaban el ser tomadas en cuenta para la igualdad de derechos, la libertad sexual, la planificación familiar, la elección de representantes gubernamentales, etc.
Desde inicios del siglo XX, algunas ciudades de Estados Unidos y otras más europeas, registraron manifestaciones políticas, en donde, sin tener una prueba legal que lo avale, declaraban días de la mujer a fechas simbólicas en donde ocurrieron acontecimientos de denigraciones o triunfos para las mujeres, como el 28 de febrero de 1909 en Nueva York por la huelga de trabajadoras textiles; o en marzo de 2014 en algunos países de Europa, cientos de marchas y mítines en solidaridad con las damas que murieron o enfermaron en la Primera Guerra Mundial.
La gota que derramó el vaso
La gota que derramó el vaso y que comienza a tomar medidas tanto para la búsqueda de un día de la mujer, como los derechos y apartados universales en pro de las damas, fue con el suceso que ocurrió el 25 de marzo de 1911 en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, donde alrededor de 150 mujeres murieron en un incendio, del que se cree fue provocado, mientras trabajaban en una fábrica de camisas con sueldos y condiciones de trabajo deplorables.
Tras más de 50 años de reuniones, convenciones, tratados, acuerdos, etc., casualmente todos presididos por hombres, el 8 de marzo de 1975 se hace oficial el Día Internacional de la Mujer, tomando como base que en países como la ex Unión Soviética, China o España, desde mucho antes, eligieron esa fecha para conmemorar a las mujeres.
Desde entonces a la fecha, cada país celebra distintamente a las mujeres, algunos organizan festivales masivos con desfiles y caravanas, y otros más, como México, con ceremonias y eventos artísticos-culturales en donde se enaltece la labor femenina, se entregan reconocimientos, o se hacen distinciones.
Mujeres en la diplomacia
Las mujeres cada vez han dado de qué hablar en distintos sectores de la sociedad mundial, ya cada vez es más común ver a damas encabezando empresas, líderes de opinión y hasta representando a sus países o comunidades en la política.
En la diplomacia no suele ser la excepción, la figura femenina, universalmente, aparece en puestos desde embajadoras hasta cónsules, ministras o agregadas (económicas, militares, culturales, etc.). También las cónyuges de los hombres con estos nombramientos, no solo tienen el papel de ser la esposa y apoyar a sus parejas en las tareas que los gobiernos les encomiendan; la mayoría, por decisión propia, asumen otras funciones, como el reunirse con otras esposas de diplomáticos y realizar acciones de beneficencia en pro del país en el que se encuentran.
En México, algunos países como Austria, Francia, Polonia, República Eslovaca, Argentina, Jamaica, Irlanda, Nicaragua, Vietnam, Rumania, Venezuela, Noruega y Nueva Zelanda, actualmente están representados por mujeres embajadoras.
Desde 1990, está conformada la Asociación de Cónyuges de Diplomáticos (ACD), constituida desde 2005 como asociación civil, que entre sus funciones, aparte de ser un espacio para la recreación de las parejas de diplomáticos, aunque en su mayoría son mujeres también participan los hombres, recaudan, gestionan y canalizan recursos financieros para ayudar a los grupos sociales más vulnerables de México.
Casualmente, la Secretaría de Relaciones Exteriores, organismo del gobierno federal que entre otras muchas funciones ratifica las cartas credenciales del cuerpo diplomático acreditado, también está encabezado por una mujer: Claudia Ruiz Massieu Salinas, quien en 2015 fue reconocida como “La Mujer del Año”, y que figura como una de las probables candidatas para las elecciones presidenciales de 2018.
“Mujer,
Difícilmente puedo expresar mis emociones mezcladas y mi pensamiento;
Después de todo, te estaré por siempre en deuda.
Y mujer, intentaré expresar mis sentimientos internos y mi agradecimiento por mostrarme el significado del éxito…”
John Lennon
Revista Protocolo
