Cumple Plan DN-III-E 50 años ayudando a la sociedad mexicana en casos de desastres naturales
El desbordamiento del río Pánuco en 1966, a consecuencia de la tormenta tropical Inés que afectó los estados de Veracruz y Tabasco, originó la puesta en marcha por parte del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana del Plan DN-III-E. Desde entonces, los mexicanos saben que en casos de desastres por fenómenos meteorológicos pueden contar con la invaluable ayuda del Ejército Mexicano.
Protocolo se reunió a conversar con el comandante responsable de la Fuerza de Apoyo para Casos de Desastre, el general de brigada diplomado del Estado Mayor, Ernesto José Zapata Pérez, quien con gran orgullo anunció que este 2016 el Plan DN-III-E cumple 50 años de vida.
El comandante —quien desde muy chico, influido por su madrina y una profesora de su escuela, así como por la admiración que sentía al ver entrenar a los cadetes en Popotla, decidió ingresar a las filas del Ejército Mexicano en el año de 1976— comentó que este operativo militar tiene como misión ayudar a la sociedad civil mexicana en casos de desastres naturales como terremotos, maremotos, deslaves de cerros y montañas, erupciones volcánicas, huracanes, tormentas tropicales, ciclones, inundaciones, incendios forestales, fuertes lluvias, desbordamientos de ríos, entre otras.
Y explicó que el plan de trabajo está dividido en dos áreas:
1. Terrestre, compuesta por ingenieros que desempeñan distintas funciones para remoción de escombros y restablecimiento en las vías de comunicación; especialistas médicos en distintas áreas con todos los instrumentos y medicamentos necesarios; personal de intendencia, específicamente, responsables del área de cocina para preparación de alimentos y encargados de brindar víveres; y policía militar, siempre acompañados por binomios canófilos (perro y entrenador) para dar seguridad a las zonas afectadas.
2. Aérea, con vehículos aéreos de ala fija (aviones) y ala rotativa (helicópteros) para traslado de personal y sus respectivos equipos, así como para evacuar a la población civil cuando se llegue a requerir.
Capacitación certificada
Ernesto José Zapata Pérez señaló que para formar parte de las Fuerzas de Apoyo en Casos de Desastre, todo el personal, aéreo y terrestre, debe estar certificado tras pasar por distintas capacitaciones para desempeñar las funciones, además que deben contar con ciertos requisitos como tener buena salud, excelente condición física, iniciativa, saber trabajar bajo presión y en equipo, pero sobre todo, una verdadera vocación de ayuda al prójimo.
Vuelta al mundo
Tantos resultados positivos ha dejado el Plan DN-III-E en su efectividad, que ha gozado de un reconocimiento internacional, pues soldados de los ejércitos de varias naciones amigas, han venido a México para capacitarse o bien, algunos elementos de la Sedena han acudido a otros países ya sea a capacitar al personal de aquellas regiones o bien, a recibir adiestramiento para ponerlo en práctica en México.
Finalmente, el general Zapata subrayó que “el pueblo de México puede seguir confiando en sus fuerzas armadas, que tienen unidades debidamente capacitadas, organizadas, adiestradas para cualquier necesidad en cualquier parte del país”.
Revista Protocolo
